España se opone a reabrir los objetivos de reducción de emisiones contaminantes para los vehículos fijados por la Unión Europea para 2025, que podrían acarrear multas a los fabricantes si no cumplen, pero pide que se estudien medidas para estimular al sector europeo de la automoción.
"Los objetivos marcados no deben ser reabiertos, pero somos muy sensibles y entendemos la situación difícil que está atravesando el sector del automóvil y creemos que hay que esperar e invitar a la Comisión Europea a que tenga en cuenta esta situación y valore todos los mecanismos para apoyar la oferta y la demanda en beneficio del sector", dijo el secretario de Estado para la UE, Fernando Sampedro, a su llegada al consejo de ministros de Industria de la UE.
Durante el mismo, un grupo de países -Italia, la República Checa, Polonia, Austria, Bulgaria, Rumanía y Eslovaquia - presentará una propuesta para el sector del automóvil en la que destacan que los fabricantes podrían exponerse a multas por no cumplir los requisitos debido a la lenta implantación del vehículo eléctrico que "limitarían severamente la habilidad de la industria para invertir y la competitividad de Europa".
"Apoyamos la necesidad de medidas urgentes apropiadas y medios financieros adecuados a nivel de la UE, incluyendo un posible paquete a corto plazo, que facilite una transición justa que no mine la competitividad europea", señalan en el documento.
La emisión de los coches en España y la UE
Italia y la República Checa se habían sumado en las últimas semanas a la petición de Francia de evitar las multas previstas para los fabricantes que incumplan el objetivo marcado para 2025 de reducir en un 15% las emisiones de su flota de vehículos de pasajeros con respecto a 2021.
galan
28/11/2024