La Alianza Industrial Española exige un fondo para impulsar la competitividad en la nueva Ley de Industria

La Alianza por la Competitividad de la Industria Española ha instado al Gobierno y al Parlamento a incluir un fondo permanente de financiación en la nueva Ley de Industria y Autonomía Estratégica, cuyo anteproyecto fue aprobado hoy por el Consejo de Ministros. Aunque valoran positivamente la iniciativa, consideran que el texto actual carece de medidas concretas para garantizar el proceso de reindustrialización necesario en el país.

“La intención del Gobierno es positiva, pero sin los recursos necesarios y sin plazos definidos, corremos el riesgo de que estas medidas se queden en buenas intenciones”, señaló Carlos Reinoso, portavoz de la Alianza. Esta organización, integrada por sectores clave como la automoción, el refino, la química, la siderurgia y la alimentación, insiste en que el éxito de la Ley depende de la implementación de un instrumento financiero público que asegure continuidad y estabilidad para el desarrollo industrial.

La importancia de la industria manufacturera en España no puede subestimarse. Según datos de la Alianza, este sector genera el 60% del Producto Industrial Bruto y aporta más de 4 millones de empleos, tanto directos como indirectos. Además, representa el 67% de las exportaciones industriales y lidera el 60% de la inversión en innovación, consolidándose como un motor clave para la economía.

Pese a ello, la Alianza advierte que la competitividad de este sector estratégico está en juego si no se implementan medidas estructurales que permitan atraer inversiones, avanzar en la transición ecológica y garantizar la estabilidad frente a los retos internacionales.

Fondo de financiación permanente

La propuesta central de la Alianza es la creación de un fondo de financiación permanente, con una dotación anual estimada de 2.500 millones de euros. Este instrumento, según Reinoso, serviría para impulsar la economía circular, la descarbonización de la industria y para dar continuidad a iniciativas como los PERTEs (Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica).

“Necesitamos un esquema financiero que supere el modelo actual de ayudas puntuales y que garantice estabilidad a largo plazo. Esto no solo permitiría avanzar en la transición verde, sino también atraer grandes proyectos industriales a España”, afirmó Reinoso.

La Alianza destaca que esta medida no es solo una inversión económica, sino una apuesta por la soberanía estratégica del país, especialmente en sectores como la energía, la logística y la innovación, que resultan esenciales para competir a nivel global.

Simplificación administrativa

Además del fondo, la Alianza pone el foco en la necesidad de simplificar los procesos burocráticos que actualmente dificultan la inversión industrial. “La reindustrialización no solo depende de la financiación, sino también de un entorno jurídico y administrativo que elimine trabas y aporte previsibilidad a las empresas”, explicó Reinoso.

En este contexto, la organización hace un llamamiento al consenso político durante el trámite parlamentario del Anteproyecto de Ley. “La unidad entre las formaciones políticas será clave para garantizar que esta Ley responda a las necesidades reales de la industria y del país. Es una oportunidad histórica para demostrar visión de futuro”, subrayó el portavoz.

Medidas concretas

La ausencia de medidas concretas en el texto actual podría generar incertidumbre entre los actores industriales. Según la Alianza, sin un fondo permanente y una planificación clara, España podría perder su oportunidad de consolidarse como un referente en sectores estratégicos, especialmente en un contexto global marcado por la transición energética y la competencia internacional.

“En un entorno de incertidumbre global, como el que vivimos, es imprescindible que España ofrezca un marco estable y atractivo para la inversión industrial. Si no actuamos ahora, corremos el riesgo de quedarnos atrás frente a otros países europeos que ya están avanzando en esta dirección”, advirtió Reinoso.

Así, la Alianza cita como ejemplo las recomendaciones del ex primer ministro italiano Mario Draghi, quien ha abogado por la creación de instrumentos financieros sólidos y permanentes para impulsar la transición verde en Europa. “Es el momento de aplicar estas ideas en España, con las cuentas claras desde el principio y con un enfoque transparente y sostenible”, afirmó el portavoz.